Tamara Bunke

El 31 de agosto de 1967, la revolucionaria Haydeé Tamara Bunke cayo abatida mientras formaba parte de un comando guerrillero en Bolivia. Recordar la historia de aquellas que lo dieron todo a favor de la libertad es imprescindible, más aún en el caso de las mujeres revolucionarias cuyas historias frecuentemente han sido silenciadas.

Siendo argentina de procedencia, creció en Alemania, donde comenzó sus primeros pasos en la lucha, al entrar con 14 años en la organización Juventud Libre de Alemania para posteriormente unirse al partido socialista. Por aquel entonces eran tiempos de dictaduras en Abya Yala, pero la revolución cubana sembró el camino de la esperanza. En 1961, se dirigió a Cuba para tomar parte en las milicias populares, así como participar de distintos cometidos. Desde el comienzo dio rienda suelta a su fulgor revolucionario, lo cual potenció sus aptitudes, abriéndosele la oportunidad de tomar parte activamente en la “Operación fantasma”, cuyo objetivo era expandir la revolución por toda Latinoamérica.

Sin ápice de duda, asumiendo los riesgos que podría encontrarse, aceptó la tarea que le encomendaron al estar estrechamente relacionada con la revolución. A través de esa misión podría cumplir su sueño: tomar parte directamente en las luchas de liberación nacional latinoamericanas. Nadie dudó de su compromiso, tal y como ella misma dijo: “como revolucionaria, tan solo tengo una palabra, la cual es más importante que todos los riesgos que en el camino me he de encontrar. Puedo prometeros que la confianza que habéis depositado en mí no se quebrará, mientras quede un atisbo de vida en mi”.

Y así comenzó su camino. Tras realizar exitosos trabajos de espionaje en Argentina se dirigió a Bolivia junto al Che Guevara, donde formó parte de la guerrilla.

Allí terminaron con su vida el 31 de agosto de 1967, mientras portaba un fusil entre sus manos, con un brillo reluciente en sus ojos, con una sonrisa en la cara y con la pulsión revolucionaria en su mente. Los valores más valiosos que reflejan las revolucionarias son el convencimiento sobre la causa y el incansable espíritu de lucha, mediante los que demuestran su amor por la revolución, hasta el último aliento.